domingo, 3 de julio de 2011

Ojeras al Límite

Un día, a Roberto le empezaron a salir ojeras


No le dio importancia, pero le empezaron a crecer más


Y más


Y un poco más


Ya le subían por el lateral


Se alertó porque escalaban


Ya parecían maquillaje


La cosa no paraba


Hasta que se unieron totalmente


Si Roberto cerraba los ojos, 
parecía que llevara gafas de sol


Hasta que decidió reírse del mundo
y de sí mismo,
y se TATUÓ LAS VARILLAS



¿Sabéis cuando un helado está tan frío tan frío 
tan frío
que al probarlo te arde la lengua?
Algo muy congelado, extremadamente Antártico

Pues al pequeño Rafael (de 4 años) le ha pasado eso:
Ha probado su helado de fresa
y se ha quemado la lengua

Su instinto le ha hecho SOPLAR el helado


No es tan descabellado.

Joder, se acaba de quemar

Al fin y al cabo ha sido un acto reflejo

Es un pellizco muy humano
Un desliz de lo instintivo


Un musulman que reza arrodillado hacia la meca, con mucha devoción



Pero es un tullido de rodillas para abajo
No le hace falta arrodillarse


Ya lleva el modo rezo consigo
Siempre en ON